Photo by Asael Peña on Unsplash
TRANSPORTE:
El transporte público es, relativamente, eficiente y muy seguro. Ocasionalmente hay retrasos como en todos lados, pero en vacaciones, no hay prisa, cierto?
Photo by Wells Baum on Unsplash
Para utilizar el sistema, que combina subterráneo y autobuses, deben comprar una tarjeta (MetroCard) que cuesta US$2, el costo por viaje es de US$2.75. Si van a estar en la ciudad más de 5 días y estiman que harán más de doce viajes, es recomendable elegir la opción ilimitada de 7 días por US$31 y podrán hacer todos los viajes que quieran. Si no van a usar tanto el transporte público, carguen por valor en lugar de tiempo. Para orientación e información actualizada de rutas, pueden utilizar el app TripPlanner del MTA o Citymapper, en su teléfono celular o tableta.
COMUNICACIONES:
La conectividad de sus dispositivos electrónicos es posible sin adquirir una tarjeta de telefonía, pues hay WiFi gratuito en casi todas las estaciones de metro y en los autobuses.Photo by Enrique Alarcon on Unsplash
También brindan conexión gratuita muchas de las grandes tiendas, como Macy’s y en cafeterías como Starbucks y Panera. Además, hay hotspots en diversos parques y áreas públicas, pero si prefieren comprar el servicio, asegúrense de tener un teléfono desbloqueado que permita utilizar tarjeta de cualquier proveedor.
MOVILIZACION:
Otra cosa a tomar muy en cuenta, al visitar esta ciudad, es el calzado. A menos que circulen por la misma en automóvil, tendrán que caminar, y mucho, por lo que un calzado cómodo es vital o se les puede arruinar el paseo.
Photo by Chris Dickens on Unsplash
Los neoyorquinos caminan muy rápido y con cierto orden. Para evitar tropiezos en su desplazamiento, manténganse caminando por la derecha, tratando de dejar un espacio prudente entre ustedes y los edificios, pues todas las puertas abren hacia afuera y pueden ser golpeados, accidentalmente, si están muy cerca. No se detengan abruptamente mientras caminan. Si quieren hacerlo, para orientarse o tomar fotografías, desplácense hacia su extrema derecha mientras bajan la velocidad y traten de mantenerse fuera del camino de los demás, ellos agradecerán la consideración.
CLIMA:
La temperatura puede fluctuar hasta 10 grados en un mismo día, por lo que siempre es bueno llevar algo con que abrígarse, dependiendo de la época del año.
Photo by William Bout on Unsplash
Tanto en las noticias locales como en línea, pueden consultar el estado del tiempo para el día y prepararse para lo que venga. Los pronósticos son muy acertados, pero deben mantener la vigilancia a diario para que no se lleven sorpresas por cambios inesperados. Si se fijan bien, los neoyorquinos (los reconocerán por estar vestidos de tonos oscuros hasta en verano) siempre llevan una mochila de tamaño moderado, donde llevan abrigo, paraguas y un envase térmico con agua, además de un cambio de ropa y zapatos, ya sea para ir al gimnasio o de fiesta más tarde. Imitarlos no es mala idea, ellos saben lo que hacen, conocen los caprichos del clima y lo largo de los desplazamientos para ir y volver al teatro o a cenar al final del día, así que andan preparados.
COMIDAS:
A la hora de comer, esta ciudad es un paraíso, pueden encontrar lo que quieran de cualquier cocina del mundo. Sin embargo, no dejen de probar tres cosas que representan la esencia de la gastronomía neoyorquina: la pizza local (New York slice), el bagel con queso crema y salmón y los afamados sandwiches de pastrami de alguno de los, cada vez más escasos, «deli» tradicionales.
Photo by Christine Siracusa on Unsplash
La mejor opción, por supuesto, es consultar con el personal del hotel o el guía del tour, ellos saben donde comer bien y a precios razonables. Indíquenle por qué áreas piensan pasar el día y les darán los mejores consejos.
DINERO:
En todos los Estados Unidos, la propina es de rigor en los sitios de servicios, como restaurantes y hoteles. En Nueva York, el mínimo de propina en un restaurante es de 18% y una forma rápida de calcularlo es tomar el impuesto sobre el servicio recibido (Sales tax) que aparece en la factura, y duplicarlo, para tener un monto aceptable. En muchos casos, aparecen porcentajes y montos sugeridos en la cuenta y se puede seleccionar el que deseen dar.
Photo by Sharon McCutcheon on Unsplash
En el caso de los hoteles, a las recamareras se les debe dejar la propina diariamente, pues las rotan y si dejamos la propina al final de nuestra estadía, solo una de las que asearon nuestra habitación la obtendrá. En promedio, US$2 diarios es una suma aceptable, a menos que sean muy desordenados o hayan ensuciado mucho la habitación, en cuyo caso, sería de elemental cortesía aumentar esa cantidad proporcionalmente. A los botones, si se encargan de nuestro equipaje (siempre preguntarán primero si deseamos asistencia), un promedio de US$1-2 por maleta, dependiendo del tamaño y peso, es lo correcto, y un par de dólares más por conseguirnos un taxi será muy apreciado. Por cierto, también se da propina a los taxistas, así que no olviden dejar algo de dinero para el que los lleve de vuelta al aeropuerto al final del viaje.
Dependiendo qué parte de la ciudad visiten, puede que haya sitios que no acepten tarjetas de crédito, como en Chinatown donde muchos negocios se manejan, exclusivamente, con efectivo. Siempre es recomendable llevar algo de dinero para evitar contratiempos, pues muchas tiendas y cafeterías pequeñas no aceptan dinero plástico. Billetes de US$20, o denominacionesmás bajas, son lo más recomendable, pues no es tan fácil cambiar billetes de US$50-100.
Con estos datos y sus ganas de viajar, estarán más que preparados para pasar unos días inolvidables en la capital del mundo.